viernes, 2 de marzo de 2012

Me da igual si fallas o follas.

¿Sabes qué pasa? Que desde que te fuístes de mi vida, dejándolo todo manga por hombro he espabilado bastante. Puede que me artára de llorar yo sola gastando cajas y cajas de pañuelos, puede que me recorriera cada una y todas de las esquinas de nuestra casa buscando tu olor, tu calor, y no lo encontrara. Aquí no hay brujas, ni manzanas encantadas que cuando despiertas todo es de color de rosa, no, aquí o apechugas o lo pierdes todo, o levantas cabeza o te la agachan, o jodes o te joden a tí, o abres los ojos de una puta vez o se te cierran eternamente, y eso tampoco es así.
Lloré por ti lo que no está escrito, pero poco a poco se vé que clase de personas hay en el mundo, y tu clase no me gusta para nada, porque gracias a esos llantos, a esas tardes desoladas viendo películas para no pensar en ti, gracias a esos hombros que he tenido de apoyo cuando te fuistes, gracias a los palos recogidos en mi vida, gracias a todas las caídas, creo que espabilé, que ilusa verdad, a estas alturas espabilandome no por mi misma, si no por la gente, pero me la resbala si fallas o follas, nunca es tarde, yo reharé mi vida, y a ti simplemente que te den.

No hay comentarios:

Publicar un comentario